Tres factores que hacen rentable invertir en vivienda en la Región Caribe

Barranquilla, junio de 2025. En medio de los desafíos que enfrenta el sector de la construcción en Colombia, la Región Caribe se posiciona como un territorio clave para la inversión inmobiliaria, mostrando señales claras de recuperación, dinamismo y proyección de valorización sostenida. Según cifras de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), el comportamiento del mercado en 2025 refleja una conjunción positiva de estímulos a la oferta, condiciones financieras más accesibles y una reducción continua en las tasas de interés hipotecarias, que hoy oscilan entre el 10% y el 11.5% E.A.

Departamentos como Atlántico, Bolívar y Magdalena han registrado un incremento en la demanda de vivienda, destacándose la participación de compradores internacionales, que actualmente representan el 16% de las ventas en la región. Este fenómeno, sumado a inversiones en infraestructura clave, impulsa una valorización proyectada superior al promedio nacional en los próximos 3 a 5 años.

En este contexto, Prodesa, constructora con más de tres décadas de experiencia en el país, identifica tres factores determinantes que convierten a la región Caribe en un destino estratégico para adquirir vivienda:

1. Desarrollo sostenible e innovador

La región Caribe vive un auge de proyectos habitacionales que no solo transforman el entorno urbano, sino que también establecen estándares en sostenibilidad. Proyectos como Orizzo en Puerto Colombia, y Cóndor y Águila en Barranquilla, así como Praseo, Strada y Trevi en Cartagena, lideran el camino hacia comunidades más responsables y modernas.

Estos desarrollos promueven una arquitectura que mejora la calidad de vida de los residentes y estimula el progreso social y económico de las ciudades donde se ubican.

2. Viviendas con propósito

Hoy, los compradores buscan más que una vivienda: desean espacios funcionales, sostenibles y con un fuerte componente de bienestar. Por ello, Prodesa ha incorporado en sus proyectos tecnologías como iluminación LED, paneles solares en zonas comunes, sistemas de recolección de aguas lluvias y diseños bioclimáticos.

Estas soluciones integrales no solo benefician al medio ambiente, sino que también contribuyen a reducir costos y a crear comunidades más armónicas, alineadas con las expectativas de las nuevas generaciones.

3. Una región con alto potencial de crecimiento

La inversión en grandes obras de infraestructura en la región está elevando el valor del suelo urbano y la calidad de vida. Proyectos como la ampliación de la Circunvalar de la Prosperidad en Barranquilla, la renovación del centro histórico de Cartagena y la implementación de nuevas troncales de transporte público refuerzan el atractivo de la zona para quienes buscan plusvalía y conectividad.

Además, los compradores pueden hoy acceder a modelos de financiación más accesibles, con planes de pago flexibles, separación desde montos bajos y acompañamiento personalizado en trámites de crédito y subsidios locales.

“Aunque la dinámica de los subsidios ha sido variable, el mercado en ciudades como Barranquilla, Cartagena y Santa Marta muestra un comportamiento sano y resiliente, con precios que crecen de manera sostenible. Esto, junto a nuevas inversiones y mayor interés de colombianos en el exterior, augura una valorización por encima del promedio nacional en el mediano plazo”, afirmó Luis Fernando Reina, gerente de la Regional Caribe de Prodesa.

Invertir en vivienda en la Región Caribe no solo es rentable: es apostar por un desarrollo urbano responsable, inclusivo y con visión de futuro. Con el respaldo de Prodesa, cada proyecto representa una oportunidad para construir calidad de vida y transformar positivamente el territorio.