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"La violencia contra los trabajadores es un ataque al corazón de Colombia": UTIPEC

  • Foto del escritor: William Pedraza
    William Pedraza
  • 4 oct
  • 2 Min. de lectura
UTIPEC rechaza y condena de la manera más enérgica los cobardes atentados en contra de los trabajadores del (INPEC).
UTIPEC rechaza y condena de la manera más enérgica los cobardes atentados en contra de los trabajadores del (INPEC).

BOGOTÁ, D.C. 4 de octubre de 2025 – La Unión de Trabajadores de la Industria Petrolera y Energética de Colombia (UTIPEC) rechaza y condena de la manera más enérgica los cobardes atentados ocurridos esta mañana en contra de los trabajadores del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC). Expresamos nuestra total solidaridad con la institución, y extendemos un profundo mensaje de respaldo a todas las familias afectadas por esta inaceptable ola de violencia.


Los ataques sistemáticos contra los funcionarios del INPEC no son solo un problema de orden público; son un síntoma de la grave descomposición y el desprecio por la autoridad que atraviesa el país. La violencia que hoy enluta a esta institución es la misma que intimida a los sectores productivos y que busca, a través del miedo, desmantelar el Estado de Derecho en Colombia.


"Hoy, nuestra solidaridad es con los valientes hombres y mujeres del INPEC y sus familias. Como trabajadores, entendemos el riesgo que enfrentan quienes visten un uniforme y le sirven al país", manifestó Alejandro Ospina Angarita, presidente de UTIPEC.


"La vida de un guardián del INPEC es tan sagrada como la de un trabajador petrolero o un campesino. Permitir que los violentos impongan su ley es una afrenta contra toda la sociedad y un camino directo hacia la anarquía"

.

Desde UTIPEC, hacemos un vehemente llamado al Gobierno Nacional para que actúe con la contundencia que la situación amerita. No bastan los comunicados de rechazo; se necesitan acciones reales y eficaces. Exigimos:


1. Garantías de seguridad inmediatas y efectivas para todos los trabajadores colombianos.


2. Una política de Estado clara y firme que enfrente a las organizaciones criminales que amenazan a los servidores públicos.


3. Un mensaje de respaldo contundente por parte del Presidente de la República a las instituciones que, como el INPEC, son un pilar fundamental para la seguridad y la justicia en Colombia.


La defensa de nuestros trabajadores colombianos es la defensa de la institucionalidad y del futuro del país.

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